Muchos pacientes con pie plano acuden a la consulta con dolor en la cara interna del tobillo, en ocasiones , de tiempo de evolución. Su pie no ha soportado las fuerzas a las que se le ha sometido y llega a su tope de resistencia, en forma de distensión o rotura del ligamento de spring. Esto se traduce en dolor y una progresiva incapacidad para caminar.
El pie necesita estabilidad, tanto en dinámica como en estática y las estructuras responsables de esto son:
De la estabilidad estática:
–Ligamento de spring.
-Ligamentos plantares.
-Ligamento deltoideo.
De la estabilidad dinámica:
Las personas más susceptibles de sufrir este tipo de lesión, son los adultos con pie plano.

Paciente con pie plano y rotura del ligamento de Spring, diagnosticada con ecografía, en pie izquierdo.
El diagnóstico se hará mediante exploración clínica y ecográfica en primer lugar, siendo en ocasiones necesario realizar una resonancia magnética. El estudio biomecánico, si se encuentra en estadios iniciales, dará muchas pistas acerca del hundimiento del arco plantar y de las patologías asociadas que este puede producir.
El tratamiento inicialmente es: aliviar el dolor con fisioterapia y analgesia pautada por especialista y con plantillas ortopédicas a medida, con el fin de “sostener” el arco plantar en la fase media del apoyo ,durante la pisada. El pie plano de estos pacientes, unido a la lesión del ligamento de Spring, que no proporcionará la estabilidad que el pie necesita, tendrá aumentados sus grados de pronación fisiológicos. Y esta hiperpronación, hay que controlarla con la plantilla, para que la lesión no evolucione a más.
Tras la recuperación de la discontinuidad fibrilar o distensión del ligamento, será importantísimo realizar ejercicios de fortalecimiento del tibial posterior y de propiocepción. Esto servirá para estabilizar las articulación del tobillo. Activar los mecanorreceptores, situados en los ligamentos, es esencial para que estos hagan bien su función y puedan soportar las cargas a las que les sometemos con cada paso.

Ejercicio de fortalecimiento del tibial posterior. El paciente se pone de puntillas y aguanta 5 segundos arriba.

Ejercicio de propiocepción de tobillo. El paciente se pone a pata coja. Descalzo y sobre el suelo ( no en superficie inestable) con el otro pie dibuja en el aire nombres, figuras o lo que desee, a fin de tener ese desequilibrio, que activará lo mecanorreceptores situados en los ligamentos, próximos a la inserción.
Es muy importante realizar un diagnóstico exhaustivo y precoz, para que el tratamiento sea efectivo y la lesión del ligamento de Spring, no deje secuelas al paciente, pudiendo esté realizar sus actividades con normalidad, tras la recuperación.