Las plantillas , tanto las extraíbles del propio calzado como las ortopédicas a medida pueden darnos muchos datos.
Es muy importante observar las plantillas de nuestros hijos para evitar daños en sus pies. Hay señales que no se pueden ni deben obviar:
–Dedos marcados con relieve.
–Agujeros en zonas concretas.
–Desgaste muy marcado en algunas zonas.
Estas “señales” nos indican que algo no va bien y hay que poner solución.
Plantillas en las que se puede ver los dedos marcados con relieve, señal de que le están pequeñas.
Que los dedos estén marcados y con cierto relieve, nos indica que los zapatos y /o las plantillas ortopédicas , le quedan pequeñas. Los peques engarran los dedos para que no les den con la punta.
Los agujeros o zonas más desgastadas, nos indican un aumento de presión excesiva en esa zona, y tampoco es “normal”.
Cualquier anomalía en la plantilla nos alerta de un posible problema biomecánico, que ya tenga nuestro hijo o incipiente, que se puede desencadenar, si no prestamos atención.
De igual modo, el calzado por fuera también nos aporta datos relevantes. Si hay una zona, ya sea en la parte anterior ( por los metatarsianos) o por la posterior( el talón) que está excesivamente desgastada quizás debamos consultar con un podólogo.
Ante la menor sospecha y / o duda:
– Valorar al pequeño.
-Hacer un estudio biomecánico de la pisada.
–Examinar el calzado.
Hacer un diagnóstico mediante un minucioso estudio de la pisada, dar unas pautas a los papis y mamis acerca de como gestionar la compra del calzado adecuado y explicarles que es lo patológico y que lo normal, forma parte de una buena consulta podològica.
Estamos en el momento de comprar el calzado para el nuevo curso y para las actividades deportivas extraescolares. No perdamos de vista la prevención y para ella el podòlogo es nuestro mejor aliado.