Tener las tibias varas o “arqueadas” como comúnmente se llama, puede incapacitar mucho para desarrollar actividad deportiva de impacto.
Esta forma arqueada de las tibias ocasiona muchos problemas:
-En las rodillas.
-En los tobillos.
-Quinto metatarsiano.
Los meniscos están sometidos a mucha presión en la cara interna , mientras que la parte externa son los ligamentos los que sufren por la extensión debido al bostezo articular. Esto se traduce en esguinces de los ligamentos externos de la rodilla y roturas de menisco interno.
Imagen radiográfica de “piernas arqueadas”. Se puede apreciar la presión en la cara interna de la rodilla y el bostezo articular en la parte externa.
Los pies adoptan una posición en supinación,” pisando hacia fuera”, haciendo que los músculos peroneos sufran mucho. Los esguinces de tobillo, las tendinitis de los peroneos e incluso pequeño “arrancamientos” del peroneo lateral corto en su inserción, son problemas frecuentes en estos pacientes.
Pies equinos en paciente con tibias varas.
El quinto metatarsiano, sujeto a la presión extra que supone llevar el pie en hipersupinación en las distintas fases de la marcha, puede provocar fracturas por estrés de este.
Estas consecuencias de tener las tibias varas pueden aparecer aisladas o todas, dependerá de muchos factores personales de cada paciente.
Es interesante realizar un tratamiento preventivo para que o bien no sucedan , o si ya lo han hecho, para evitar que se repitan. Esto se hará acudiendo al especialista del pie , el cual nos realizará un estudio biomecánico de la pisada.
Con la exploración ecográfica podrá valorar el estado de los músculos, ligamentos y tendones que más trabajan con este tipo de pisada. Con la radiografía, descartar posibles fracturas por estrés del quinto metatarsiano. Con la exploración dinámica y los test , evaluar como ha de ser la plantilla ortopédica a medida, que mejor se adecue a la biomecánica que presenta, para evitar ” males mayores” y que el paciente pueda desarrollar su actividad deportiva con tranquilidad, ya sea correr, jugar al fútbol o cualquier deporte de impacto.
Aliviar presiones es fundamental en las rodillas y tobillos de este tipo de pacientes para alargar la vida deportiva, y se puede hacer con una exhaustiva exploración y de la mano, un buen tratamiento.