Muchas personas acuden a consulta con dolor y lesiones en los tendones peroneos. Hay varias patologías que sufren con bastante frecuencia, y que es importante diagnosticar correctamente para tratar de una forma eficaz.
Los tendones peroneos están en el lateral del tobillo, salvo el llamado tercer peroneo, que está en la cara anterior. Su función es la de estabilizar el pie cuando caminamos, y la de realizar la flexión dorsal y la eversión.
Recorrido del músculo peroneo.
Imagen en la que se puede ver el recorrido del tendón peroneo.
Localización de tendones peroneos. El peroneo lateral corto se inserta en el quinto metatarsiano , mientras que el largo, cruza por la planta para insertarse en el primer metatarsiano.
Cualquier persona puede sufrir una lesión en los tendones peroneos, pero son factores predisponentes tener:
-Pie cavo -varo.
-Musculatura de gemelo corta y fuerte.
-Uso de tacones altos.
-Pies inestables.
-Uso de zapatillas blandas.
-Fractura bipartita de sesamoideos.
-Falta de de entreno de fuerza en corredores.
Estos factores incrementan la posibilidad de padecer lesiones en estos tendones tan importantes, que controlan el movimiento y estabilizan el arco interno del pie.
Prominente cola del quinto metatarsiano del pie derecho en paciente con pie cavo -varo inestable y lesión de tendones peroneos de ambos pies.
¿Y cuales son las lesiones más frecuentes?
-Tendinitis.
-Tendinosis.
-Luxación.
-Esguinces repetidos.
-Roturas.
-Síndrome de “os peroneum”.
Los esguinces repetidos bien por déficit en la estabilidad o la fuerza del pie, por tener un pie cavo-varo o por otras circunstancias, pueden dar lugar a una tendinosis, que a su vez puede derivar en roturas, por ser tejido de mala calidad.
La alteración del retináculo, tejido que rodea al peroneo y lo mantiene en su posición, puede dar lugar a la luxación de estos. Viéndose en la cara posterior del peroné una zona convexa,o abultada, en vez del surco profundo normal. “Saltando” los tendones a la cara anterior del peroné.
El “os peroneum” es el hueso accesorio más frecuente del pie, que aparece en la articulación calcaneo- cuboidea , y que provoca una fricción del tendón del peroneo lateral largo, dando lugar a desgarros del tendón.
Radiografía oblicua de paciente con os peroneum.
Imagen en la que se puede ver como el os peroneum provoca fricción en tendón del peroneo lateral largo.
Todas estas patologías tienen como síntoma común el dolor en la zona posterior y lateral del tobillo, el cual puede estar presente incluso en reposo. Dolor que incapacita para la práctica deportiva y para las actividades de vida diaria, imposibilitando la marcha y la carrera.
Este dolor incluso puede sentirse en todo el lateral de la pierna por la aparición de puntos gatillo, debido a una “marcha antiálgica”, es decir, que el paciente trate de apoyar “diferente” apara evitar el dolor en el lateral del pie.
El diagnóstico está basado en tres pilares:
-Ecográfico: para ver el recorrido de los tendones hasta su inserción y comprobar la integridad de estos y del retináculo.
-Clínico: realizando test de estrés en varo, pidiendo al paciente que se ponga de puntillas o haciendo una flexión plantar del primer dedo contra resistencia. Estas maniobras, provocarán dolor y se verá si los tendones “se salen de su sitio” y / o crepitan.
-Radiográfico: realizando radiografía oblicua y dorso plantar ante la sospecha de os peroneum.
Importante realizar diagnóstico diferencial con dos fracturas relativamente frecuentes, que en ocasiones pasan desapercibidas si no se realiza un buen diganóstico: fractura por estrés del hueso cuboides o del quinto metatarsiano por avulsión.
El tratamiento dependerá de la patología, obviamente y del paciente. La rehabilitación física de manos del fisioterapeuta, los ejercicios de propiocepción y fuerza, la electrólisis percutanea ecoguiada, férulas estabilizadoras e incluso cirugías en las roturas o en las luxaciones que se resistan a los tratamientos conservadores, son la batería de tratamientos propuestos.
Fundamental es evitar la causa que provocó el problema. Realizar un estudio biomecánico de la pisada en el que podremos estudiar que va mal en el pie, que alteración en los apoyos, que problemas de estabilidad o que desencadena esa falta de fuerza. Las plantillas ortopédicas a medida estabilizan el pie y permiten una pisada correcta, por lo que son parte fundamental del tratamiento del paciente con lesión en los tendones peroneos.
Las lesiones en los tendones peroneos son frecuentes y muchas veces se quedan en diagnósticos ” pobres”. Esto lleva a padecer incapacidad y frustración tras ver como se dilata en el tiempo, sin encontrarnos mejor, incluso estando cada día peor. Una buena exploración y diagnóstico diferencial serán la clave para un buen tratamiento y una excelente recuperación.