La cirugía de la uña encarnada es altamente eficaz y elimina los dolores y las incapacidad de calzarse de forma rápida y definitiva.
La uña enterrada bajo los rodetes provoca: dolor, hipertrofia de los rodetes e infección.
La cirugía se hace de forma ambulatoria y bajo anestesia local del dedo ,quemando la celulas matriciales con un ácido previa retirada del lateral de la uña encarnado.